Cómo decirlo… nuevamente… una y otra vez. Las historias se repiten pero siempre los hechos son diferentes. Todo pasa de nuevo con increíble rapidez, todo sucede una y otra vez como si fuera la primera cada vez.
No tiene caso decirlo, la volubilidad habla suficiente por mí.
Malditas necesidades, inútiles presuposiciones.
Los hechos son unos, los supuestos otros.
Uno imagina, dos actúa… o no.
Finalmente, nada.
Recordé una historia de un día, de unos minutos:
«Tuvo todo el tiempo del mundo y pudo realizar las cosas como deseaba. Podría haber planeado evento por evento y haberle d